Sobre las fotos y vídeos que se toman en las funciones infantiles
Fuente: Diario Mi Hijo Ed. 43Niños cantando villancicos, bailando, pequeñas obras de teatro, gimnasia rítmica… El fin de año nos regaló muchas ocasionen en que los niños participaron en actos, especialmente del colegio o jardín infantil. Y… ¿qué se hace con las cientos de fotos y videos que los orgullos padres y otros familiares les tomaron?
Cuando se graba a un hijo, inevitablemente también se graba a los niños que están a su alrededor, sin el permiso sus padres, sin preguntar si quieren ser grabados y mucho menos si autorizan luego su reproducción en las redes sociales, provocando una acción que está en el límite de la legalidad, aunque no lo parezca.
La mayoría de los familiares y padres, prudentemente graban y fotografían para su uso personal y privado, sin mandar nada a redes sociales. Como mucho lo compartirán por WhatsApp con algún amigo o familiar que estará feliz de verlos. Pero aquellos padres menos prudentes, orgullosamente suben fotos y videos a las redes sociales permitiendo que potencialmente cualquiera pueda ver a su hijo y muchos otros niños y sus familiares, facilitando la entrega de todo tipo de información sobre dónde encontrar a esos niños en la vida real.
En el contexto de que algunos padres no quieren exponer a sus hijos a esto -y están en todo su derecho-, ya hay colegios, clubes deportivos y academias que, tal vez por haber recibido quejas o por propia iniciativa, están prohibiendo que se tomen fotos o se filmen los actos en que participen niños. Aunque esto pueda parecer exagerado, no siempre es adecuado entregar información personal que puede ser usada maliciosamente.
Un caso complicado que es preciso ir reflexionando para tomar conciencia e informarse sobre cómo resguardar la información que comparto a través de las redes sociales.